Identidad

Arderé, sin duda arderé…  Mucho tiempo apartado de este lugar. He intentado apartarme, evitar escribir, cerrar el cajón de mis depresiones, empaquetar todo y mandarlo dirección al olvido. No sé hasta que punto esto tiene sentido, pero yo sigo… No os equivoquéis, no soy ningún infeliz, tan solo alguien que necesita “sentir” para seguir vivo. ¿Qué le voy a hacer? Impaciente con el corazón… Por mucho que intente aparentar no sé escapar al daño pero así mi ego y yo llevamos años. Mis horas son eternas, semanas cortas, noches largas, es lento el tic tac sin embargo los años vuelan, pero  sé que aun queda. A pesar de todo sigo adelante con la misma mirada, la de los ojos cansados evadiendo depresiones, cazador de sensaciones. No miento si digo que sin amor me siento pobre, sin embargo no hay cansancio con la fe del que ha empezado. Al fin y al cabo fuerza de voluntad es lo que nos define, si faltara te volverías invisible. ¿Pero es esto suficiente? Llevo años arrastrando ese esfuerzo, esas buenas intenciones, tratando de no traicionar alguno de mis valores pero… Haga lo que haga la recompensa no compensa mi estado de ánimo. Lo importante es ser buena persona  pero sin sueños poco se puede avanzar, siento que me falta identidad. Monotonía, hastío, soledad…Yo no soy ese tipo de persona ¿Acaso lo bonito olvidó dejar su huella?

Ya me dieron tiempo más que de sobra para pensar ¿No me entiendo, tú me entiendes? Esto que siento no viene en el diccionario. ¿Acaso no he dejado ser ese tímido chico, típico chico atípico que siempre calló, que siempre guardó todo por dentro? Borracho de rechazo y timidez, el tiempo no lo cura. Minaron mi moral y aun quedan espinas en mi personalidad pero… ¿De verdad nada he cambiado? Si es así… ¿Porqué me noto diferente? Incluso noto que lo sienten. Caminar es avanzar y yo camino a mi manera, perdiéndome para encontrarme tras mis pasos. Porque tengo miedo, porque no me encuentro, porque redoblé mi esfuerzo, crucé caminos, acepté cambios, dejé salir mi personalidad… Pero éste quien soy no es el mismo tipo del espejo.

Sé que soy impaciente, intranquilo, que debería ser más despreocupado ¿Qué importa quien seas mientras seas tú mismo? Pero es que no hay nada con lo que yo pueda decir “Me identifico”, quiero correr, avanzar, experimentar, dejar de perseguir mis propios pasos,  pero ¿como hacerlo sin tener claro como es el dueño de éstas manos? Por más que haya hecho no he encontrado respuesta a mis preguntas y cuando he intentado obviarlo he ido contra mi natura… Para mí es impensable no esforzarse, no moverme, no intentar…pero me falta un motivo. Ya probé a tan solo esperar, despreocuparme, vivir sin más…pero no es mi estilo, no puedo parar de avanzar. Y a quien le disguste mi pensar  ¿Tengo ganas de tirar palante y qué? Cansando de vivir así, harto de fingir, siento huir el tiempo, cosas que viví son mi cicatriz, traumas que desangran en versos, que desangran el alma, en busca de una calma inalcanzable…pero ésta atmosfera no es fiable. Al fin y al cabo solo me queda esta escritura triste. Que nadie me hable, este silencio es mio…

Y es que tan solo necesito recordar para sentir, pero el corazón me pide tregua. Eterno aprendiz de todo hoy siento el impacto de cada sueño hecho pedazos. Ame sin control, peleé sin motivo, cruces de cables y cicatrices, he llegado a sentirme único, he estado al borde de perder el control y ESO…Sí que es sentirse vivo. Si es que realmente no me encuentro mal, ya no lloro, pero estoy melancólico. Me amarga pensar que todo lo que luché pierde hoy su sentido, pero el fuego de mis ojos no lo apagan lágrimas. Y veo que el resto es feliz con cosas que yo sencillamente aborrezco… Lo siento pero las caretas son para fiestas no para vivir, ni mentiras, ni orgullo, ni objetos, enfados, opiniones o perdones, sois diferentes por fuera que por dentro. ¿Sabéis que pienso de esa estupidez? Las aborrezco, esas cosas no significan nada para mí son solo palabras, quizás estará bien para vosotros pero a mí no me sirve. Quiero decir que si yo hago algo malo, quiero pagar por ello a mi manera, así que decido mi propia penitencia para mis propias acciones. Me importa una mierda lo que el resto diga, es posible que nadie me entienda pero ya me da igual… Soy rehacio a creer vuestras historias, bellas maravillosas vidas de mierda. Viviré una vida fea pero sin mentiras, me di cuenta que hoy quien no sufre se vuelve gilipollas.

Y que más da, desahogarse es lo que importa que te entiendan es un capricho. Si nunca dejé de sentirme solo aun con alguien, con los que me acompañan ya no soy cálido, se siente árido, me limito a mirar serio. N es eso lo que siento, pero nace así de mí cual vástago, la rosa se ha cansado de ser hermosa. Quizás lo que me mata es mi egocentrismo al saber que no soy vital para nadie en este vaivén, necesito mi motivo.  Yo no pienso que he nacido para algo pero no es tan simple, no tenéis ni idea de lo que han pisado mis pies. Quise un final feliz y no pasó del prólogo, sufrido por amor y se supone es para disfrutarlo cada segundo, no quiero rimar más la palabra amor con dolor ¿Pero como pasar página si la siguiente es idéntica? Qué un día luché por lo mismo que ahora me hace daño, si es que no me queda rabia…tan solo pena. Mente rota desde niño, he perdido la cuenta de las veces que me he lanzado al vacío pero sin duda la única forma de sentirse vivo. Pero sé cuando hay que retroceder,  el que aprende a valorar tiene mucho aprendido.

Es extraño  porque realmente no recuerdo haber hecho un gran daño, porque cuando dije que voy a por todo, fuí a por todo. No quiero dejar que mi ilusión mengue, si no reluce el oro lo hará aquello que comparta…

Tan solo en busca de un trayecto sin curvas…Y alguien dispuesto a acompañarme.

Tú, asquerosamente bonita, un precioso defecto de la naturaleza.